jueves, 24 de septiembre de 2009
Han logrado una primera imagen.
Hace unos días el equipo del doctor Jonás Gutierrez logró hacer una superdensitometría espectral del campo de fuerza S, por lo que podríamos decir que ha ocurrido un avance histórico en la investigación del fenómeno.
La superdensitometría espectral del campo de fuerza S se trata de un tipo de imagen generada a través de la detección de las radiaciones S. La dificultad para lograrla radica en que esta fuerza apenas interactúa con la materia. Tan solo parece tener efectos sobre el tejido humano, en especial con el cerebral.
Para lograr captar la imagen ha sido necesario preparar una placa de zinc recubierta por millones de neuronas generadas en cultivos de laboratorio a partir de células troncales. Una vez se ha logrado esto a la plancha se le añaden una serie de tintes y materiales fotosensibles. La lámina es expuesta a un sofá del que se sabe que está afectado por este tipo de campo y es sometida a una corriente de 150.000 voltios. Las neuronas se vaporizan al instante pero reaccionan con el zinc de la plancha mientras lo hacen generando fotones. Estos dejan una marca sobre los elementos fotosensibles y los tintes, por lo que se forma una imagen nítida.
Como podemos ver el campo S cuenta con líneas de fuerza, aunque a diferencia del electromagnético estas forman una espiral que se aplana.
martes, 15 de septiembre de 2009
El campo S
Hace poco investigadores del CEIC (Centro español de investigaciones científicas) han descubierto un nuevo tipo de campo en la naturaleza. Hasta ahora se conocían cuatro tipos de estas magnitudes: gravitatorio, electromagnético, nuclear fuerte y nuclear débil. Ahora hay que sumar también el campo S.
El campo S tiene una naturaleza muy extraña. De hecho está presentando un grave problema para todos los modelos actuales que explican el universo. En primer lugar se da única y exclusivamente alrededor de los sofás (sobre todo en los españoles, donde la incidencia es del 73%). Interactúa atrapando a aquel individuo que se sienta sobre dicho mueble, sin detectarse ningún tipo de anomalía gravitatoria ni electromagnética. Aquel que cae bajo su influjo es incapaz de volver a levantarse del mismo y actúa como si estuviera profundamente sedado. En segundo lugar se trata de una fuerza que jamás antes había sido detectada, lo cual es bastante extraño debido a sus evidentes efectos. Esto ha hecho a algunos pensar incluso que se trata de un fenómeno reciente. Además se ha observado que, por norma general, se observa siempre cuando se da la conjunción de un sofá y un televisor.
En una fase inicial de las investigaciones se pensó que las radiaciones electromagnéticas producidas por la pantalla de televisión interactuaban de alguna manera con las fibras sintéticas de la mayoría de los sofás. No obstante esta teoría se descartó rápidamente, en gran parte debido al profundo conocimiento que se tiene actualmente de las radiaciones electromagnéticas. También resultaba fuera de normal el componente sintético del que se hace referencia, pues no existe un material que sea generalizado en la construcción de los sofás.
Así pues únicamente queda seguir investigando y descubrir sus efectos nocivos en el cuerpo humano. Hasta ahora, que se conozcan, podemos encontrar:
1- Profunda regresión y comportamientos infantiloides por parte de individuos adultos.
2- Estado mental lento y apático, muy parecido al provocado por ciertos anestésicos.
3- Lagunas en la memoria e incapacidad para mantener los recuerdos por periodos superiores a uno o dos meses.
4- Pérdida de gran parte de las habilidades motrices.
5- Agarrotamiento muscular profundo.
Todo esto se traduce en una total incapacidad para levantarse del sofá en los casos avanzados. Si bien en las primeras fases el individuo, con mucho esfuerzo, puede escapar del campo para hacer sus necesidades o comer se observa a los pocos minutos una fuerte e inmediata necesidad por volver al mismo. Se desconoce qué cambios fisiológicos provocan dicha necesidad así como si esta es física, psicológica o una combinación de ambas.
Este blog va a tratar sobre este campo, sus efectos y los avances que se produzcan sobre la compresión del mismo y la cura de los afectados.
El campo S tiene una naturaleza muy extraña. De hecho está presentando un grave problema para todos los modelos actuales que explican el universo. En primer lugar se da única y exclusivamente alrededor de los sofás (sobre todo en los españoles, donde la incidencia es del 73%). Interactúa atrapando a aquel individuo que se sienta sobre dicho mueble, sin detectarse ningún tipo de anomalía gravitatoria ni electromagnética. Aquel que cae bajo su influjo es incapaz de volver a levantarse del mismo y actúa como si estuviera profundamente sedado. En segundo lugar se trata de una fuerza que jamás antes había sido detectada, lo cual es bastante extraño debido a sus evidentes efectos. Esto ha hecho a algunos pensar incluso que se trata de un fenómeno reciente. Además se ha observado que, por norma general, se observa siempre cuando se da la conjunción de un sofá y un televisor.
En una fase inicial de las investigaciones se pensó que las radiaciones electromagnéticas producidas por la pantalla de televisión interactuaban de alguna manera con las fibras sintéticas de la mayoría de los sofás. No obstante esta teoría se descartó rápidamente, en gran parte debido al profundo conocimiento que se tiene actualmente de las radiaciones electromagnéticas. También resultaba fuera de normal el componente sintético del que se hace referencia, pues no existe un material que sea generalizado en la construcción de los sofás.
Así pues únicamente queda seguir investigando y descubrir sus efectos nocivos en el cuerpo humano. Hasta ahora, que se conozcan, podemos encontrar:
1- Profunda regresión y comportamientos infantiloides por parte de individuos adultos.
2- Estado mental lento y apático, muy parecido al provocado por ciertos anestésicos.
3- Lagunas en la memoria e incapacidad para mantener los recuerdos por periodos superiores a uno o dos meses.
4- Pérdida de gran parte de las habilidades motrices.
5- Agarrotamiento muscular profundo.
Todo esto se traduce en una total incapacidad para levantarse del sofá en los casos avanzados. Si bien en las primeras fases el individuo, con mucho esfuerzo, puede escapar del campo para hacer sus necesidades o comer se observa a los pocos minutos una fuerte e inmediata necesidad por volver al mismo. Se desconoce qué cambios fisiológicos provocan dicha necesidad así como si esta es física, psicológica o una combinación de ambas.
Este blog va a tratar sobre este campo, sus efectos y los avances que se produzcan sobre la compresión del mismo y la cura de los afectados.
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